Disponer de una marca con una identidad propia, que te diferencie de la competencia, conecte con tu público y esté alineada con tu propuesta de valor, sin duda puede ser la diferencia entre el éxito o el fracaso de tu negocio.
La imagen de marca es una cuestión clave para las compañías, es el vehículo que posibilita el contacto con el entorno; clientes, empleados, proveedores, inversores, … debe trasmitir los valores del negocio y permitir ser percibidos como nos gustaría que nos vieran.
Disponer de una identidad visual propia y diferenciada te facilitará posicionar tus productos en el mercado. La identidad corporativa es un instrumento que permite desarrollar y fortalecer los valores de tu marca y no se debe quedar en el logotipo, se deberán fijar criterios gráficos y estilos que se hagan extensibles a los materiales corporativos, a los productos y a las campañas de comunicación y redes sociales.
